Todos los que convivimos con un perr@ tenemos el desafiante reto de pasear con él sin que esto nos genere una gran incomodidad e, incluso, alguna lesión en músculos del brazo y de la espalda que ni siquiera sabíamos que existían.
En nuestro artículo “Aspectos fundamentales para evitar que tu perro tire de la correa” encontrarás algunas premisas que debes tener en cuenta antes de enfrascarte en el mundo de “cómo enseñar a tu perro a pasear de la correa”.
Es importante que puedas leer ese artículo, ya que en él encontrarás factores más que relevantes que debes conocer y que pueden ayudarte a entender por qué tu perro tira tanto de la correa. O, incluso por qué, por mucho que lo corriges, no atiende absolutamente a nada y eso provoca que vuestros momentos juntos mientras salís de casa sean un auténtico calvario.
Si te sientes identificado con estas últimas palabras en este artículo te hacemos llegar varios consejos que puedes llevar a cabo para que todo mejore y vuestros paseos sean de mejor calidad.
TEN EMPATÍA
Lo primero que debes tener en cuenta es que tu perr@ no sabe que a ti no te gusta que tire de la correa.
Si lees el artículo que te aconsejábamos en el párrafo anterior verás que el perro ha sido de gran utilidad para arrastrar objetos o personas durante muchos años y aún en nuestros tiempos sigue siéndolo.
Con esto queremos decirte que no te tomes el hecho de que tu perr@ tire de la correa como algo personal porqué no lo es para nada.
Entiende que debes empezar desde cero para poder enseñar a tu compañer@ que a ti no te gusta que haga aquello para lo que ha sido creado.
ENSEÑA DESDE LA CALMA
Siempre que quieras enseñar a tu perr@ algún comando en especial (sentarse, tumbarse, darte la pata, ir a tu lado, etc.) es importante que tengas en cuenta que lo debes hacer desde la calma, no desde la excitación.
Con esto queremos decirte que nadie puede aprender nada cuando está expuesto a estímulos que desencadenan atracción o miedo. Sea como fuere, no podemos ser capaces de concentrarnos en nada mientras estamos gestionando emociones de todo tipo.
Si entiendes este último párrafo comprenderás porqué tu perr@ muchas veces no atiende a lo que quieres enseñarle.
Si quieres enseñarle a que vaya a tu lado cuando va de la correa deberás hacerlo primero en un entorno relajante y controlado sin que nada ni nadie pueda perturbar su concentración.
Poco a poco, podréis ir cambiando los escenarios para que el reto vaya haciéndose cada vez más difícil siempre que tu compañer@ haya comprendido perfectamente lo que quieres en cada paso que das mientras le enseñas.
NUNCA CORRIJAS ANTES DE ENSEÑAR
Aprender desde el castigo no es satisfactorio para nadie. Puede ser en muchas ocasiones una solución rápida, pero no es más que un parche con el que tu compañer@ aprende a hacer cosas cuando se las pides desde el miedo a unas consecuencias.
Ten paciencia y haz las cosas como te gustaría a ti, desde la resolución de problemas y la proactividad. Escoge un buen motivador y provoca que tu perro vaya a tu lado aportándole el refuerzo cuando haga la conducta que tú deseas. De esta manera, le explicarás qué es lo que quieres y establecerás una relación sana desde el liderazgo que hará que su confianza en ti no tenga fin.
NORMAS BÁSICAS DEL PASEO
Desde el primer momento deberás tener unas normas básicas durante el paseo. Tu constancia en estas normas marcará la diferencia en el resultado.
Según el Método Kanstak® hay tres premisas que debemos tener en cuenta siempre que paseamos con nuestro perr@ de la correa:
MARCAR EL RITMO Y DIRECCIÓN.
Nosotros debemos marcar la dirección del paseo y el ritmo siempre teniendo en cuenta las necesidades físicas del perro. No debería ser tu acompañante quien decida por dónde ir y a qué ritmo, ya que muchas veces eso no podrá ser viable. Si se lo permites siempre, lo que queda es una gran frustración cuando no sea posible y te dificultará mucho el paseo.
NO CRUZARSE.
Mientras andamos o mientras estamos parados, el perro no puede cruzarse constantemente. No importa con qué brazo cojas la correa e incluso puedes cambiar de brazo cuando lo desees siempre que no se cruce cuando él quiere. Si puede ser, nunca lo cruces por delante de ti. Intenta hacerlo siempre por detrás de ti.
NO ACCEDER A NADA MEDIANTE LA TENSIÓN DE LA CORREA.
Este punto puede ser mucho más difícil de llevar a cabo si tenemos en cuenta que puede tirar la correa en múltiples ocasiones que le permitimos. Por ejemplo, saludar a alguien que conoce, querer olfatear algo, querer jugar con otro perr@, amenazar a algún estímulo, etc. Debemos ser coherentes en este aspecto y no permitir NUNCA que nuestro compañer@ puede acceder a nada como consecuencia del tirón, sin importarnos si es porqué está contento o enfadado.
TENER EN CUENTA LAS FASES DEL PASEO
Todo paseo debe tener unas fases en las que andamos, jugamos, olfateamos e interactuamos con el entorno. Imprescindible tener en cuentas estas fases para que el paseo sea de gran calidad. Para ello os invitamos a ver nuestro video “Conoce las diferentes etapas del paseo” según Kanstak Educación Canina®.
CONSTANCIA
Por último, decirte que la constancia será básica para que el aprendizaje sea correcto. Analiza todas las situaciones que te encuentras durante el paseo y entenderás que va a costarte mucho tener siempre en cuenta las normas básicas.
Sé consciente de cada paso que dais juntos y sé constante en las normas que estableces para que, poco a poco, vuestro paseo se vuelva el momento tan especial que siempre has soñado.